Ya llega la primavera, y a todos nos gusta salir a disfrutar de estos maravillosos días soleados al campo.
El caso es que a los insectos también les gusta salir mucho en esta temporada, y a veces resulta imposible evitarlos y toparnos con ellos. Las picaduras de las avispas y las abejas, son las picaduras más comunes que podemos sufrir en el campo, piscinas etc.
Hoy hablaremos de un maravilloso remedio que nos ayudará a curar esas picaduras.
Tan solo necesitaremos agua y amoniaco. Dos elementos muy fáciles de conseguir en casi cualquier sitio. Removemos medio vasito de agua con 3 cucharadas soperas de amoniaco y después lo aplicamos sobre las picaduras de avispa o de abeja.
Enseguida notaremos como se alivia el dolor de la picadura, se reduce la inflamación y mejora mucho la zona afectada.
Este remedio es muy eficaz, pero es conveniente saber que es solo para picaduras leves. Si somos alérgicos debemos acudir con urgencia al médico.