El crecimiento y el desarrollo de los países industrializados, ha mejorado mucho la vida de las personas, pero también ha hecho que la contaminación desencadene en patologías fatídicas.
El uso de sustancias químicas para desarrollar ciertos productos, es un gran problema a tener en cuenta.
Según la OMS, alrededor de un cuarto de todo el conjunto de enfermedades de la población y un 23% de las muertes prematuras, se atribuyen a factores medioambientales ocasionados por productos químicos.
Las personas estamos en continuo contacto con todas estas sustancias químicas, ya sean gases líquidos o sólidos que todo ellos presentan efectos tóxicos y actúan de forma fulminante en el organismo.
Ayer mismo, uno de los articulistas de ConsejosNaturales.com, hacía referencia a lo perjudicial que pueden llegar a ser los plásticos, aluminios y otros componentes utilizados en nuestras cocinas.
Estas intoxicaciones, por lo general dañan el genoma y el anormal funcionamiento de los tejidos y los órganos de nuestro cuerpo.
Por supuesto, hay que destacar las patologías más graves, tales como cánceres y problemas relacionados con la reproducción y el desarrollo.