Algo muy típico cuando salimos de la ducha, es desenredarnos el pelo con un cepillo. En muchas ocasiones una vez hecho esto, podemos apreciar que hay una gran cantidad de pelos en el cepillo que se han desprendido de la cabeza.
¿Es bueno cepillarse o desenredarse el pelo después de la ducha?
La respuesta es “no” y la explicación es muy clara. Cuando nos duchamos, solemos hacerlo con agua tibia o caliente. El agua caliente, hace que los poros de la piel se dilaten y al igual pasa con los folículos pilosos, y cuando esto ocurre, el pelo tiene mucha menos sujeción en el cuero cabelludo. Por lo tanto, cepillarse el pelo cuando el cabello está recién salido de la ducha, favorece a que lo podamos arrancar con mucha más facilidad y por lo tanto, es mucho mejor esperar a que esté completamente seco para empezar a cepillarlo o a desenredarlo.