Conocemos la piña por ser una fruta diurética y depurativa que nos ayuda a eliminar las impurezas de nuestro organismo, pero tiene muchas más propiedades y beneficios que muchos de nosotros no conocemos. Por ello, hoy hablaremos sobre la piña, una de las frutas más sanas.
Uno de los principios activos más característicos de la piña es la bromelina. La bromelina es una enzima que rompe las moléculas proteicas para una mejor asimilación de los aminoácidos. Además de mejorar la digestión de los alimentos, la bromelina tiene efectos diuréticos, antisépticos, desintoxicantes, antiácidos y vermífugos. Esta enzima tiene propiedades antiinflamatorias, lo que convierten a la piña en un remedio natural para combatir enfermedades como la artritis, el dolor de garganta, la sinusitis o la gota. También tiene propiedades antitrombóticas, lo que hace que la piña sea un anticoagulante natural, y mejora el sistema inmune.
Hoy en día se está estudiando a fondo la bromelina debido a que existen indicios de que tiene propiedades anticancerígenas, al favorecer la destrucción de las células cancerígenas. Hay que dejar claro que este hecho no está aún demostrado científicamente, por lo que tendremos que esperar a ver si se confirman o desmienten estos indicios.
En cuanto a las vitaminas hay que decir que la piña tiene una gran concentración de vitamina C, lo que convierten a esta fruta en una gran fuente de antioxidantes. Además de prevenir y combatir resfriados y gripes, la vitamina C mejora el sistema inmunitario y ayuda a que nuestro cuerpo absorba de una manera más efectiva el hierro y el calcio. Esta vitamina también genera una protección frente a los radicales libres, responsables de enfermedades como la diabetes, la artritis, la aterosclerosis y enfermedades cardíacas entre otras. La piña también contiene vitamina B1, esencial para que ciertas enzimas produzcan la energía necesaria para su correcto funcionamiento. En menor cantidad, encontramos en esta fruta vitaminas B2, B3, B5, B6 y B9.
En la piña se encuentran también una gran cantidad de minerales como el yodo, el magnesio, el fósforo y el calcio, que junto a la vitamina C mejoran la salud de la tiroides y de las células nerviosas. Por otra parte, esta fruta también nos aporta azufre, hierro y potasio, que mejoran la función de las hormonas sexuales e influyen en la producción de enzimas. Por último, en cuanto a los minerales, hay que destacar también la presencia de manganeso en la piña, que mejora la producción energética de ciertas enzimas.
Está demostrado científicamente que la gran cantidad de antioxidantes que posee esta fruta mejoran la salud de los ojos, más concretamente es muy efectiva para prevenir la degeneración macular, una enfermedad ocasionada por daños o deterioro de la mácula. La mácula es una capa de tejido sensible a la luz que se encuentra en la parte posterior de ojo, en el centro de la retina. La mácula proporciona agudeza visual, por lo que si está sana podremos apreciar detalles pequeños. Cuando no funciona correctamente la visión se vuelve borrosa y turbia.
Para terminar, destacaremos que la piña es una gran fuente de fibra, por lo que nos ayudará a prevenir y combatir el estreñimiento.