El hierro es un mineral imprescindible para nuestro organismo, por lo que debemos mantener unos niveles adecuados de él para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. Cuando el nivel de hierro no es el suficiente durante un periodo relativamente largo de tiempo, es posible que se presente la anemia ferropénica, forma más común de la anemia.
Todo el mundo necesita incorporar hierro a su organismo, pero especialmente los bebés y los niños, las mujeres embarazadas, las personas que sufren cualquier tipo de sangrado, las que donan sangre con frecuencia, las que padecen afecciones gastrointestinales que no les permiten absorber los nutrientes con normalidad y los atletas de grandes distancias.
Dependiendo del sexo de la persona y de la etapa en su vida en la que se encuentre, un individuo va a necesitar incorporar a su cuerpo mayores o menores cantidades diarias de hierro, pero podemos generalizarlo a entre diez y quince miligramos de hierro al día. Si a través de la alimentación no se llega a estos niveles, va a ser necesario tomar un suplemento de hierro para no sufrir las consecuencias de una anemia.
Por otra parte, tenemos que tener en cuenta que un exceso de hierro también nos puede causar una serie de problemas, sobre todo de hígado y de corazón, lo que significa que es aconsejable que comprobemos nuestro estado de salud de forma periódica para evitar cualquier tipo de dolencia, no solamente un déficit o un exceso de hierro.
Vamos a ver una lista de alimentos que nos van a ayudar a elevar la cantidad de hierro en sangre:
En esta tabla podemos observar que tanto los lácteos como las frutas no son ricos en hierro, pero es necesario que destaquemos que son igualmente importantes. Los lácteos van a aportarnos proteínas y vitamina B12, siendo especialmente importantes en los casos de anemia. Las frutas por su parte ponen a nuestra disposición cantidades importantes de ácido fólico y vitamina C, ambos imprescindibles en los casos de anemia. Además, una de las funciones de la vitamina C es facilitar la absorción de hierro por parte de nuestro organismo.
Todo ello viene a decirnos que es fundamental combinar en nuestra dieta de aumento de hierro aquellos alimentos ricos en hierro que puedan elevar los niveles de este mineral en nuestro cuerpo, con lácteos y frutas para mejorar y facilitar dicho aumento.
Si optamos por los suplementos de hierro tenemos que saber que la absorción de hierro es mayor con el estómago vacío, pero ingerir este tipo de suplemento sin haber comido nada puede provocarnos ciertas molestias en el estómago, como pueden ser náuseas, acidez, e incluso vómitos. Por ello es recomendable tomarlos habiendo comido un poco, como por ejemplo, media pieza de fruta.