El colesterol es una sustancia grasa natural que está presente en todas las células del cuerpo como un elemento crucial en la estimulación de la producción de hormonas, la función de la bilis y de vitamina D de procesamiento. Para las condiciones normales de funcionamiento, el sistema sólo necesita una pequeña cantidad de colesterol en la sangre, una vez que hay exceso de grasa, se depositará en las paredes de las arterias que conducen a la enfermedad coronaria y otros problemas cardíacos relacionados con la salud provocados por obstrucciones arteriales.
¿Cómo podemos combatir el colesterol alto? Una dieta sana y natural es la mejor manera de mantenerse en forma, por no hablar de que hay ciertas hierbas y frutas o verduras que incluso bajan el nivel de colesterol en la sangre.
El ajo es un remedio natural exitoso en la lucha contra el colesterol y los estudios demuestran que esta ventaja se debe a su función principal como resultado de ser un alimento anti-oxidante. El ajo reduce efectivamente los niveles de triglicéridos, que son las primeras medidas para tomar cuando se enfrenta el colesterol. Decenas de proyectos de investigación científica confirma el hecho de que la inclusión de dos dientes de tamaño mediano de ajo en sus comidas diarias reduce el colesterol sérico, mientras que también ayuda a la prevención de la absorción del colesterol. El principal efecto de gran responsable del ajo es la alicina, la sustancia que da el olor específico para la planta. Para aquellos que no pueden soportar el olor o tiene problemas digestivos y no toleran el ajo, hay suplementos que sintetizan los principales componentes.
Entre otros alimentos para el colesterol son considerados las frutas y hortalizas incluidas en una dieta equilibrada. Las naranjas, los limones, el pomelo y el limón son los protagonistas de una dieta acompañada de manzanas, fresas o kiwis, todo gracias a su alto contenido en vitamina C, conocida por su lucha contra el colesterol y las propiedades antioxidantes. De los alimentos, el ácido alfa-linoleico es el más difícil de tomar, pero no imposible. El aceite crudo de lino, y el aceite de oliva extra virgen son las principales fuentes de Omega 3 que deben incluirse en su dieta.